Cuando los solicitantes de empleo, no pasan las entrevistas de trabajo, tienden a asumir que se puede deber a su mala suerte, o a la gran cantidad de personas que actualmente buscan trabajo como diría algún economista, a la ley de la oferta y la demanda, mucha demanda de puestos de trabajo pero poca oferta de los mismos. Mientras que la tasa de desempleo general puede perjudicar las posibilidades de que una persona pueda obtener un trabajo, hay un montón de otras razones por las que no se les contrata. Los solicitantes de empleo pueden mejorar sus posibilidades de ser contratado mediante la comprensión de estos secretos que los empleadores no quieren que sus candidatos sepan.
Los empleadores no están buscando el candidato más calificado
Mientras que las calificaciones sin duda importan, el trabajo no siempre llega a la persona más calificada. Los empleadores también valoran la personalidad, es por esto que con frecuencia van a contratar a alguien menos calificado, pero que pueda adaptarse a la cultura organizacional de la mejor manera y con mayor rapidez. Incluso el candidato más calificado puede tener un montón de conocimientos y experiencias pero si no tiene esa capacidad para adaptarse con facilidad al clima organizacional, será rechazado en la misma entrevista, debido a que esto es algo que con mayor frecuencia es detectado por los entrevistadores. Recuerde, lo que menos quieren los empresarios, son personas que trabajen como islas dentro de su empresa, eso disminuye la capacidad de producción y por ende representa perdida para el empleador. Así que a partir de ahora, trabaje en fortalecer su capacidad para establecer buenas relaciones con los demás.
Las Referencias Personales
Cualquier candidato que realice una solicitud de empleo, puede encontrar a más de una persona que le sirva como referencia para su hoja de vida. Pero tenga en cuenta que los empleadores saben que las referencias de un candidato no siempre son creíbles y pueden dejar de lado detalles importantes de nuestro perfil o currículo. Cuando alguien que realiza una solicitud de empleo, es capaz de dar una referencia de buena reputación como alguien a quien el empleador sabe o alguien que es muy respetado en el campo, esto le puede otorgar una ventaja, teniendo en cuenta que el empleador puede tomar más en serio esta referencia.
Tenga en cuenta siempre, su presentación personal.
Aunque la apariencia de una persona no debería importar en la sala de entrevistas, los empleadores a menudo rechazan a los candidatos que se presentan a la entrevista con un aspecto descuidado, demasiado sexy o muy de moda, ya que parece poco profesional. Por lo general se baje que los candidatos que tienen piercings o tatuajes visibles o que están usando cadenas o aretes, no serán tenidos en cuentas en una entrevista de trabajo. Por otro lado, a una persona atractiva es muy probable que la contraten para el trabajo, debido a que para muchos empresarios, las personas atractivas pueden atraer más ventas.
Los solicitantes son rechazados por pequeños detalles.
Al ordenar una gran lista de candidatos calificados, los empleadores a menudo comienzan rechazar solicitantes por detalles de menor importancia con el fin de reducir la lista de posibles contrataciones. Mientras que los empresarios nunca le dirán a los solicitantes de empleo las verdaderas razones por la cual fueron descartados, dan razones poco claras a las agencias de contratación, tales como: el solicitante comía chicles, usaba colonia muy extravagante, o el solicitante dijo que "al igual que" demasiadas veces. Recuerde los empleadores siempre están realizando filtros parta descartar aspirantes.
Los empleadores no quieren contratar a los desempleados.
Mientras que los nuevos puestos de trabajo deben disminuir la tasa de desempleo de un territorio, con demasiada frecuencia, los empleadores prefieren contratar a personas que ya están empleados en otro lugar. Los empleadores a menudo asumen que las personas que han sido despedidos de sus trabajos anteriores no eran lo suficientemente valioso.
Los empleadores tienen un plan B.
Incluso después de recibir una oferta de trabajo, los solicitantes no están completamente seguros de la vacante. Los empleadores a menudo tienen una segunda y tercera lista de candidatos para su elección, y disponibles en caso de que algo pase con su primera opción. Los candidatos todavía tienen que actuar como un profesional, como si todavía estuviera siendo entrevistado, no baje la guardia hasta que firmen el contrato.
El salario es negociable.
Los empleadores están en el negocio de hacer dinero y mejorar sus resultados, y si se pueden contratar a un solicitante por menos de lo que el cobra, lo harán. A menudo inician conversaciones salariales, dando un número bajo y esperan a que los solicitantes pidan más para poder negociar. Aunque los solicitantes puedan aceptar la cifra baja inicial, los empleadores siempre están dispuestos a pagar menos de lo que serían si el solicitante había negociado.
Mientras que algunas de estas cosas son inevitables, depende del solicitante, hacer todo lo que pueda para dar una buena impresión en el empleador. Su futuro laboral depende de ello.
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